Dos poemas más

 Qué te voy a enseñar.

Qué te voy a enseñar,
Si no supe lo que era la poesía
hasta que rocé tus labios.
Aprendí a escribir un verso
por cada sonrisa que me dedicabas,
y media poesía se plasmaba
bajo tus miradas cargadas de azúcar.

Qué te voy a enseñar,
si todo lo que sé, tú me lo has mostrado,
con risas, besos y abrazos por la espalda.
Mírame a los ojos. Cuencas vacías.
Viértete en ellos, y quizás,
podamos derramarnos juntos.
Thomas Bravo Almazán.

Constelaciones

Eran dos ventanas ámbar, donde parecían esconderse mil puestas de sol. 
A veces llovían. 
Eran miles de estrellas salpicadas en su piel, 
dibujando y desdibujando constelaciones, 
siendo los astros con los que los sin techo se acostaban cada noche.
Era una puerta al paraíso adornada con una alfombra roja,
la cual pocos se atrevían a tocar, pero miles de palabras de allí se escapaban,
llenando de placer nuestros oídos.
Era un dolor. 
Un dolor intenso que, sin querer, removía todo su cuerpo. 
Rompía los cristales de las ventanas, desordenaba las estrellas, sellaba la puerta
 y se iba sin pedir perdón.
 Thomas Bravo Almazán. 
Thomas Bravo Almazán.
Inés Fernández  López-Lefebre
Paula Escalona Doña
Laura Peralta López
Ana Patricia Ocaña Pozo

Comentarios